Arash Arjomandi, discípulo cercano de Eugenio Trías, intenta descubrir aquí, en compañía del lector, las prescripciones o reglas para tener una vida buena (según expresión de muchos filósofos), es decir, aquellas prácticas cotidianas que sincronicen, de un modo sostenible, la satisfacción con la vida, por un lado, y el placer o deleite, por otro.