MUÑIZ / MUÑIZ GRIJALVO, ELENA
Se publican aquí por vez primera de manera conjunta y en edición española los himnos a la diosa Isis, compuestos en griego y en latín. Las hermosas alabanzas a la diosa del Nilo son obras maestras de la literatura religiosa de la época helenística y romana. La desorbitada vehemencia en la exaltación de la divinidad convive en estos himnos con la confianza ciega del suplicante en la benevolencia de aquella diosa lejana y cercana al mismo tiempo. Isis, una diosa de origen egipcio, se mueve con soltura en ambientes religiosos ajenos a la cultura del Nilo, asumiendo rasgos físicos y atribuciones de otras diosas, y llegando incluso a equipararse con Astarté, Hera, Afrodita o Deméter. Como Isis, otros dioses con poderes extraordinarios sufren con dolor casi humano, y de su sufrimiento pueden beneficiarse en última instancia sus fieles. Son dioses viajeros, que dejan de pertenecer a la cultura que los vio nacer y, transformados, pasan a integrarse en el mundo religioso mediterráneo de los albores de la era cristiana.
El extenso estudio preliminar y los comentarios particulares de cada himno pretenden situarlos en su contexto preciso y desvelan las claves de la vida religiosa del Mediterráneo en aquellos siglos.
Se publican aquí por vez primera de manera conjunta y en edición española los himnos a la diosa Isis, compuestos en griego y en latín. Las hermosas alabanzas a la diosa del Nilo son obras maestras de la literatura religiosa de la época helenística y romana.
La desorbitada vehemencia en la exaltación de la divinidad convive en estos himnos con la confianza ciega del suplicante en la benevolencia de aquella diosa lejana y cercana al mismo tiempo. Isis, una diosa de origen egipcio, se mueve con soltura en ambientes religiosos ajenos a la cultura del Nilo, asumiendo rasgos físicos y atribuciones de otras diosas, y llegando incluso a equipararse con Astarté, Hera, Afrodita o Deméter. Como Isis, otros dioses con poderes extraordinarios sufren con dolor casi humano, y de su sufrimiento pueden beneficiarse en última instancia sus fieles. Son dioses viajeros, que dejan de pertenecer a la cultura que los vio nacer y, transformados, pasan a integrarse en el mundo religioso mediterráneo de los albores de la era cristiana.
El extenso estudio preliminar y los comentarios particulares de cada himno pretenden situarlos en su contexto preciso y desvelan las claves de la vida religiosa del Mediterráneo en aquellos siglos.